Fomentando la cultura de los seguros en México
Esta semana que termina tuve el gusto de asistir a la 23 Convención de Aseguradores de México la cual duró dos días. 7 y 8 de Mayo. El tema central fue El desafío de la Seguridad Social. Principalmente en temas de acceso a la salud y el retiro. Retos que para todos los países del mundo, sin excepción, son de verdad un tema delicado. Sobre todo porque tiene que ver con el futuro de personas como tú y como yo. Hoy ya en domingo quiero hacer un recuento o reflexión de esos dos días. Una reflexión que te ayude a tener una idea de lo que sucedió y que sepas cómo te puede beneficiar o afectar lo que ahí se trató. Hubo paneles de discusión que trataron el papel que debe tener el gobierno en tu acceso a la salud y tu retiro.
Voy a plasmar mi impresión personal. Lo que vas a leer tómalo con esa premisa de por medio. Es importante. El primer día lo que yo vi y sentí fue pesimismo y presentación de un panorama nada alentador para el futuro. Escuche y vi a Paul Krugman, Premio Novel de Economía del 2008, dar un diagnóstico sobre México que me cimbró. México es una historia feliz, sólo la falta crecer. Casi nada. Una nueva forma de decirnos, una vez más, que los mexicanos somos pobres peros felices. Algo que parece ser. Krugman dijo: “Todo funciona bien, excepto la tasa de crecimiento” Casi nada pensé yo. Eso lo menciono en la sesión de preguntas. Tituló su conferencia “La Crisis y el Futuro”. Parece cosa menor pero no leí optimismo. Ante me había preocupado un poco sobre la forma en el Luis Videgaray había presentado un panorama. Después siguió el turno de Agustín Cartens, gobernador del Banco de México, y en mi opinión la cosa siguió igual. El optimismo brilló por su ausencia.
Al final del primer día regresé a casa con una rara sensación. Después de las conferencias y paneles iniciales, por la tarde hubo más de 20 sesiones simultáneas sobre distintos temas referentes a distintos temas. En ninguna el optimismo fue el eje central. Estadísticas y estudios que mostraban el gris panorama que le esperaba a México era el tema. Cuando mi esposa me preguntó cómo me había ido, sólo atiné a responder que bien. Ella me dijo que no me escuchaba entusiasmado. Justo fue su pregunta la que me hizo descubrir que esa sensación rara que tenía era por la falta de optimismo que había notado en el día. Tanto de los políticos como de algunos de los expositores.
Al inicio del segundo día se presentó Rudolph Giuliani, quien fue Alcalde de la Ciudad de Nueva York. Todo lo que venía diciendo en su conferencia resultaba muy interesante para mí. Habló, entre otras cosas, de Liderazgo. Y a la mitad de su conferencia habló justamente sobre optimismo. Dijo que los líderes deben ser optimista. Nadie sigue a nadie pesimista. En ese momento explicó, con unos gestos y una especie de actuación, por qué es importante el optimismo. En ese momento me atrapó por completo y supe que era justo eso lo que había hecho falta el día anterior. De hecho me puse optimista por haberlo descubierto. Grabé la mayoría de su conferencia en vídeo. Para que puedas ver la forma en que él explicó la importancia del optimismo te edité un extracto de dos minutos de ese vídeo. Ek cual puedes ver dando click aquí
Después de esa conferencia me invitaron al programa de Radio de la AMIS. Donde mencioné lo que te estoy contando aquí y que es muy probable que ya estés escuchando. Al Final de la Convención te hice un vídeo donde te compartí mis reflexiones y donde te preguntaba-> ¿De quién es responsabilidad tu acceso a la salud y tu retiro? En él te dije que independientemente de los cambios políticos que deban hacerse ambos temas primero son responsabilidad tuya. De nadie más.
En la Convención hice más cosas interesantes para poder compartir contigo. ¿Qué más hice? Coincidí con mi amigo Joan Lanzagorta de El Economista y la revista Inversionista quien ganó un Premio y con quien realicé una entrevista en vídeo que podrás ver mañana aquí. Para que veas que a la Convención fui a traer cosas para ti.
Por favor ¿cuídate mucho! No leemos mañana.